Por: Destino:
Para empezar con esta columna hay que aclarar que los aficionados o la gente que
se presenta a una arena o evento de lucha libre merece todo el respeto del luchador
por los luchadores por haber pagado su boleto y estar ahí presentes.
Pero también debe de haber un respeto del público hacia los luchadores ya que nosotros estamos ahí para brindarles un buen espectáculo y desquitar el precio de su boleto.
No hay que confundir, no estoy diciendo que la gente no vaya a gritar ya sea para
apoyar al luchador o para recordarle a su mamá en repetidas ocasiones, como
muchos otros luchadores lo han dicho “la gente puede gritar lo que quiera, que para
eso van, y para eso igual pagaron su boleto”.
Y es que en nuestro país la lucha libre se puede llegar a tomar como ir al psicólogo (con todo respeto a los profesionistas de la psicología) porque la gente visita la arena, y se olvida de sus problemas, hacen a un lado todos sus pendientes o todos sus pensamientos y se concentran en las luchas.
Ahora el problema no es cuando la gente grita groserías a los luchadores, sino que
muchos “aficionados” rebasan esta línea y piensan que pueden agredir al luchador
verbalmente (diciéndole cosas personales en su cara) físicamente e incluso psicológicamente.
Creo que muchos de nosotros hemos visto cómo estos pseudo-aficionados, agreden
físicamente a un luchador, y normalmente siempre lo hacen por la espalda. Me ha
tocado ver casos en los que aficionados les dan golpes a los luchadores cuando
estos, se encuentran cerca de la gente. O de igual manera me ha tocado presenciar
como estos “mala copa” les lanzan bebidas.
Después el luchador reacciona de la misma manera que lo hizo el aficionado, devuelve la agresión y comienza el debate en sí estuvo bien o estuvo mal.
Regularmente con los luchadores “rudos” existe más una interacción de insultos
entre público-luchador, pero es parte del espectáculo que brinda conocer y disfrutar
a un luchador de esa índole. ¿Pero llegar al grado de agredirlo fisicamente? ¿Crees
que es lo correcto? ¿Qué te vas a ganar a la gente haciéndote el chistosito o el
valiente?
No gente, golpear o lanzar cosas a un luchador ¡No está bien!, y tampoco está bien
que un luchador golpee a un aficionado pero hay algunos que se lo buscan a toda
costa.
Así que mejor evitense recibir un golpe que los pueda mandar al hospital.
Ahora ¿Agresión a un luchador psicológicamente? Si gente, estos son puntos muy
sensibles pero lastimosamente se dan, “aficionados” que se creen los fans número
número uno, mandando demasiados mensajes privados, siguiendo a los
compañeros o compañeras, e invitando a salir en forma de “citas” a luchadores,
hostigando al elemento en demasía, tanto que se llega a convertir en acoso.
Qué ellos o más bien nosotros tengamos la atención de darles una foto, un autógrafo o
un video no significa que queramos tener algo más con ustedes, todos los
luchadores apreciamos sus gestos de cariño hacia uno, pero tampoco hay que
rebasar esa línea de aficionado- luchador.
Para cerrar este texto que más bien parece regaño, me gustaría recalcar que la
lucha libre profesional existe gracias a todos ustedes, brindamos un espectáculo
para que vayan a disfrutarlo a pasar un buen rato con sus amigos, con su familia.
Por favor respeten nuestro trabajo y nosotros nos encargaremos de que ese boleto
que pagaron les haya parecido una excelente inversión. Todos los que practicamos
este deporte nos debemos a ustedes y siempre estaremos agradecidos por ello.
Espero poder convivir con ustedes muy pronto
¡Gracias por estar aquí! Nos leemos la siguiente semana, no olvides que El Destino
siempre llega.
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