Redacción: Israel López
En el mundo del marketing se dice que “la nostalgia vende” porque nos remonta a episodios amenos de nuestra vida. Apegados al citado principio, y también, orillados por el pésimo 2023 que tuvieron, la empresa propiedad de la familia Roldán Peña ha decidido traer de vuelta a varias de sus figuras que estelarizaron sus carteles a finales de la década de los 90 y principios de este siglo.
Una de las constantes entre los detractores de la caravana tres veces estelar es la “imitación” que realizan de las empresas norteamericanas, particularmente de la WWE, así como las ociosas comparaciones respecto del estilo clásico de su competencia directa en México, el CMLL.
Sin embargo, como hace algunos años lo leí en una de mis decenas de revistas de lucha, “entrar a una función de AAA es ingresar a un mundo distinto”; la producción, luces, sonido, edecanes, las storylines, las bizarras pero llamativas modalidades y por supuesto, sus peculiares personajes, o bueno, al menos esa fue su esencia en sus primeros 20 o quizá 25 años de vida.
A la muerte de su fundador, Antonio Peña, en 2006, la empresa atravesó un natural proceso de renovación y de forma paulatina, a pesar de que la internacionalización siempre fue una prioridad, la compañía comenzó a abandonar a su razón de ser: el público mexicano, para ahora enfocarse más en el mercado estadounidense.
La soberbia de sus dirigentes fue tal, que incluso el polémico Konnan, una de sus primeras figuras y hoy fungiendo en la parte creativa, mencionó hace poco más de un año que “el CMLL ya no era competencia para ellos”. La respuesta de la “seria y estable” fue brutal: llenos contundentes en todos sus eventos magnos, por el contrario, AAA incluso se vio obligada a cancelar algunas funciones ya programadas.
Son contadas las estrellas que AAA tiene hoy en día: Psycho Clown, Pentagón Jr., Pagano, Hijo del Vikingo, quizá se me escapa uno o dos elementos y ya. El talento femenil no despunta, los exóticos se renuevan pero aún no se consolidan y la división mini está prácticamente olvidada y si a esto, agregamos las constantes quejas de los aficionados por el estilo de sus narradores José Manuel Guillén y Hugo Savinovich (ambos, amplios conocedores de la industria, pero limitados para ejercer tal actividad), ahí están las consecuencias.
Inicia el 2024 y la empresa ha dado a conocer su gira “Orígenes” con un concepto retro. El pasado 6 de enero dio inicio dicha gira, siendo la sede una de las emblemáticas casas de la compañía: el Gimnasio Olímpico Juan de la Barrera de la CDMX, presentándose una muy buena entrada.
Los aficionados de antaño han recibido gratamente este concepto, donde ya se presentaron Cibernético y su Secta, Electroshock, Zorro, Heavy Metal, Súper Caló, Elegido, Pimpinela, sólo por mencionar algunos, incluso el icónico Carmelo Reyes “Cien Caras” también hizo una aparición especial en el evento.
Ya se han anunciado nuevas sedes de la gira y seguramente, en sus primeros meses la tendencia será aceptable, sin embargo, tal y como lo hicieron en esta primera función, es indispensable que los luchadores retro se enfrenten con el actual talento de la empresa para que éstos últimos terminen por despuntar, puesto que en varios de los elementos veteranos, la edad ya les comienza a cobrar factura.
A finales de año, podremos saber si la gira “Orígenes” y su concepto retro fue una decisión acertada o fallida de Dorián Roldán y compañía.
A nosotros, como aficionados, nos compete disfrutar y también, hacer notar las áreas de oportunidad.
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